Metabolismo.
La cafeína es un compuesto alcaloide del grupo de las xantinas presente en varias plantas.
Cuando consumimos cafeína, nuestro cuerpo la absorbe rápidamente; es metabolizada por el hígado y a través de la acción enzimática se convierte en tres metabolitos: paraxantina, teofilina, teobromina, que son los responsables de sus efectos.
Entre los 15 y 45 minutos posteriores a ser consumida, la cafeína aparece en el torrente sanguíneo, logrando las máximas concentraciones una hora después de su ingestión. Vale decir que, debido a su solubilidad, la cafeína llega al cerebro sin dificultad.
A diferencia de lo comúnmente pensado, la cafeína no se acumula en el torrente sanguíneo o en el cuerpo, y por lo general, se excreta a las pocas horas de haber sido ingerida. En forma simultánea, la cafeína y sus metabolitos son eliminados por los riñones a través de la orina (un 3-10% de lo que consumimos). Las concentraciones de cafeína se reducen en un 50/75% luego de 3/6 horas de haber sido consumida.
En el ejercicio.
En “Cafeína y Rendimiento”, una revisión de diversos estudios publicada en el International Journal of Sport Nutrition se concluyó que: “debido a que la cafeína atraviesa las membranas de las células nerviosas y musculares, sus efectos pueden ser más nerviosos que musculares “
Los resultados de diversas investigaciones, sugieren que el consumo de cafeína antes y durante el ejercicio actúa reduciendo la dependencia de la utilización de glucógeno (los hidratos de carbono almacenados en hígado y músculos) y aumentando el uso grasa como fuente de energía
Una de las explicaciones del aumento del rendimiento en deportes de resistencia radica en que la genera una descarga de adrenalina que tiene como consecuencia un estímulo de la función cardiovascular incrementando la fuerza de contracción y la presión arterial. Otro factor importante para este incremento en la resistencia es el aumento de la lipólisis o liberación de ácidos grasos, aumentando sus niveles en plasma. Así se consigue una utilización más eficaz del glucógeno muscular y por ello se afirma que la cafeína actúa como ahorradora de glucógeno (Bowman, 1984). A través de este mecanismo se obtiene un sensible aumento en el rendimiento físico para esfuerzos aeróbicos y de larga duración.
Efectos.
La cafeína actúa bloqueando los receptores de adenosina en nuestro cuerpo. La adenosina es un neuromodulador que produce un efecto sedante e inhibitorio de la actividad neuronal, por lo que la cafeína, al bloquear sus receptores, ejerce un efecto contrario.
Las endorfinas son capaces de inhibir las fibras nerviosas que transmiten el dolor, y el consumo de cafeína aumenta la secreción de endorfinas, por lo que sus propiedades analgésicas podrían disminuir la percepción del dolor mientras corremos y aumentamos nuestro esfuerzo físico.
La cafeína es un compuesto alcaloide del grupo de las xantinas presente en varias plantas.
Cuando consumimos cafeína, nuestro cuerpo la absorbe rápidamente; es metabolizada por el hígado y a través de la acción enzimática se convierte en tres metabolitos: paraxantina, teofilina, teobromina, que son los responsables de sus efectos.
Entre los 15 y 45 minutos posteriores a ser consumida, la cafeína aparece en el torrente sanguíneo, logrando las máximas concentraciones una hora después de su ingestión. Vale decir que, debido a su solubilidad, la cafeína llega al cerebro sin dificultad.
A diferencia de lo comúnmente pensado, la cafeína no se acumula en el torrente sanguíneo o en el cuerpo, y por lo general, se excreta a las pocas horas de haber sido ingerida. En forma simultánea, la cafeína y sus metabolitos son eliminados por los riñones a través de la orina (un 3-10% de lo que consumimos). Las concentraciones de cafeína se reducen en un 50/75% luego de 3/6 horas de haber sido consumida.
En el ejercicio.
En “Cafeína y Rendimiento”, una revisión de diversos estudios publicada en el International Journal of Sport Nutrition se concluyó que: “debido a que la cafeína atraviesa las membranas de las células nerviosas y musculares, sus efectos pueden ser más nerviosos que musculares “
Los resultados de diversas investigaciones, sugieren que el consumo de cafeína antes y durante el ejercicio actúa reduciendo la dependencia de la utilización de glucógeno (los hidratos de carbono almacenados en hígado y músculos) y aumentando el uso grasa como fuente de energía
Una de las explicaciones del aumento del rendimiento en deportes de resistencia radica en que la genera una descarga de adrenalina que tiene como consecuencia un estímulo de la función cardiovascular incrementando la fuerza de contracción y la presión arterial. Otro factor importante para este incremento en la resistencia es el aumento de la lipólisis o liberación de ácidos grasos, aumentando sus niveles en plasma. Así se consigue una utilización más eficaz del glucógeno muscular y por ello se afirma que la cafeína actúa como ahorradora de glucógeno (Bowman, 1984). A través de este mecanismo se obtiene un sensible aumento en el rendimiento físico para esfuerzos aeróbicos y de larga duración.
Efectos.
La cafeína actúa bloqueando los receptores de adenosina en nuestro cuerpo. La adenosina es un neuromodulador que produce un efecto sedante e inhibitorio de la actividad neuronal, por lo que la cafeína, al bloquear sus receptores, ejerce un efecto contrario.
Las endorfinas son capaces de inhibir las fibras nerviosas que transmiten el dolor, y el consumo de cafeína aumenta la secreción de endorfinas, por lo que sus propiedades analgésicas podrían disminuir la percepción del dolor mientras corremos y aumentamos nuestro esfuerzo físico.
Según varios estudios la cafeína tiene múltiples efectos en nuestro
organismo, la mayoría beneficiosos y alguno de ellos indeseables. Los
principales efectos son:
- Psicoestimulante
- Broncodilatador
- Aumento de la frecuencia cardíaca
- Vasoconstricción a nivel cerebral (reduce las cefaleas)
- Mejora del rendimiento físico
- Actúa como protector coronario
- Reducción del cansancio y la fatiga
- Analgésico
- Aumento de la secreción gástrica ácida
- Efecto diurético y laxante
- Disminuye la agregabilidad plaquetaria y la inflamación
- Aumenta la vigilia en las fases del sueño
- Prevención del Párkinson y del Alzhéimer
- Aumento del rendimiento cognitivo
- Riesgo de aborto espontáneo
- Afección al crecimiento fetal
A pesar de los diversos efectos de la cafeína, el
organismo puede crear tolerancia a está aumentando el número
de receptores de adenosina. De este modo nos volvemos más sensibles a la
adenosina y el efecto de la cafeína disminuye, por lo que necesitaríamos
consumir cada vez más cafeína para notar sus efectos.
A su vez, también crea síndrome de abstinencia en consumidores constantes y sus principales síntomas son: dolor de cabeza, náuseas, fatiga, somnolencia, irritabilidad, ansiedad e incapacidad para concentrarse. Se considera adicta a la cafeína a aquella persona que consume más de 3 tazas de café diarias.
La intoxicación por cafeína es algo poco común y sus síntomas son fácilmente detectables, entre ellos el insomnio, la taquicardia y el nerviosismo.
Fuentes:
Bioquímica / Cafeína sobre el sistema nervioso
Runfitners/ ¿Cómo funciona la cafeína en nuestro cuerpo?
Xombit/ Como afecta la cafeína al cuerpo/ Carmona Sandra
A su vez, también crea síndrome de abstinencia en consumidores constantes y sus principales síntomas son: dolor de cabeza, náuseas, fatiga, somnolencia, irritabilidad, ansiedad e incapacidad para concentrarse. Se considera adicta a la cafeína a aquella persona que consume más de 3 tazas de café diarias.
La intoxicación por cafeína es algo poco común y sus síntomas son fácilmente detectables, entre ellos el insomnio, la taquicardia y el nerviosismo.
Fuentes:
Bioquímica / Cafeína sobre el sistema nervioso
Runfitners/ ¿Cómo funciona la cafeína en nuestro cuerpo?
Xombit/ Como afecta la cafeína al cuerpo/ Carmona Sandra